Cuvillo echó en Madrid una corrida bien presentada (con la excepción, tal vez, del último) y con un comportamiento alejado de lo que es una corrida fácil y comercial. Aún así hubo toros a los que se les pudieron hacer cosas (los tres primeros) y los toreros no siempre estuvieron acoplados. En otros, las dificultades técnicas impiden saber si habiendo hecho alguna otra cosa se hubieran podido solucionar los cabezazos al final de la embestidas que daban algunos de los animalitos.
Curro Díaz no estuvo bien. No se acopló con el primer toro, un toro al que se le podía (y, en su caso, se debía) haber hecho una faena importante. Entrar en una sustitución por Manzanares exige un plus de decisión y fortaleza que Díaz no demostró. Quedó inédito con el capote y tampoco con la muleta dejó destellos de ese arte que sabemos que tiene. El cuarto tuvo más dificultades y tampoco estuvo el de Linares para complicarse mucho la vida. Lo peor, la fea cornada en la mano que le dio al tratar de descabellarlo. Esperemos que se reponga pronto y que podamos verlo (con otra actitud, con otro resultado) en la corrida que aún le queda en la Feria del Aniversario.
Perera en el segundo hizo una faena con transmisión en la que, además, nos llevamos un susto tremendo en la feísima voltereta que le dieron. Antes había conseguido alguna serie profunda, de buen trazo, entendiendo bien al toro,... El asunto se diluyó cuando se echó la muleta a la izquiera y le dio la voltereta. Al final hubo un serio arrimón, una estoca y una oreja no demasiado rotunda. El quinto fue muy flojo y salvo un lance de recibo y la disposición del torero, no hubo mucho más.
Talavante en el tercero comenzó muy bien la faena, sobre todo en algunos naturalezas de gran trazo. Tuvo un susto mediada la faena que resolvió con inteligencia y un punto de suerte y la faena no acabó de ser rotunda porque el toro no tenía una embestida limpia y no permitían la continuidad necesaria. Hubo petición (a mi juicio, de parecida intensidad a la de Perera), pero no le dieron la oreja. El sexto fue mucho más complicado y el comienzo de faena tuvo muchos enganchones. Con paciencia y técnica, Talavante fue haciendo al toro y pudo sacar un buen par de tandas al final que, sin embargo, no llegaron a conectar del todo. Mató de una estocada casi entera caida.
Por delante fue Joao Moura hijo, a quien no puede ver porque llegué tarde y en eso del acceso a la localidad en esta plaza son gente muy seria.
La tarde, sin llegar a emocionar, nos permite sacar conclusiones. Curro Díaz debe querer más (con su toreo, queriendo, puede tener un hueco claro en el escalafón, pero hay que estar mucho más decidido). Perera está en el camino, por ímpetu y claridad, de volver a sus mejores momento, pero aún le queda un camino por recorrer. Y Talavante también necesita un punto más de decisión y técnica para solucionar los problemas de los toros menos lucidos, pero está avanzando mucho en su sentido estético. Si se acopla con los toros puede dejarnos faenas memorables, como apuntó a principios de temporada en Vistalegre, Olivenza,... Y, además, está matando mejor.
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1 comentario:
Qué pena que a Curro se le pasen tardes así.
De Talavante, si domina su carácter y aprende a matar, podemos espera algo muy bueno, pero su apatía siempre es motivo de preocupación, si el escalafón se apretara, lo que sin JT y Manzanares no parece, lo podría pasar regular.
Lo de Perera, creo, es sólo pasajero.
Ya entiendo menos la sustitución por el Cid en la tomasada...
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